Aficionados del Mallorca Sufren Acoso en Arabia Saudí
Indignación de todos los aficionados ante el acoso sufrido por los seguidores del Mallorca
La Semifinal entre el Real Madrid y el RCD Mallorca de La Supercopa de España, celebrada en Yeda, Arabia Saudí, ha sido escenario de momentos de auténtica humillación en lo que prometía ser una fiesta del fútbol. Aficionados y familiares del Mallorca sufrieron el acoso de cientos de seguidores del Real Madrid de Arabia Saudí a la salida del King Abdullah Sports City.
Testimonios de asistentes al encuentro han denunciado como desde el estadio hasta el autobús, que les llevó al hotel, fueron objeto de un auténtico “pasillo de la vergüenza” donde fueron acosados, con una evidente carencia de seguridad, registrándose tocamientos no consentidos, insultos, empujones, burlas y actitudes intimidatorias.
Aficiones Unidas lamenta y condena enérgicamente esta situación, un escenario que no tiene cabida en el fútbol, ni en ningún otro ámbito de la sociedad y desea que se esclarezcan los hechos y se identifiquen a los responsables. Su Presidente Jorge Guerrero, ha mostrado su total apoyo a la Unió de Penyes Mallorquinistes y a todos los aficionados del Mallorca, y ha declarado “Es inaceptable que los aficionados, que son el alma de este deporte, vivan situaciones de vulnerabilidad en un evento de estas características. Es fundamental que estos encuentros, independientemente del lugar en el que se celebren, estén diseñados con protocolos de seguridad claros y efectivos, asegurando la integridad de los aficionados”.
En medio de la controversia Rafael Louzán, Presidente de la RFEF, decidió no denunciar públicamente los hechos, y sí agradecer el cariño recibido esos días en Yeda, durante el acto institucional posterior al partido. Este discurso ha generado aún un mayor malestar entre los seguidores bermellones y todos los aficionados al fútbol.
Estos hechos reavivan el debate sobre la idoneidad de llevar la Supercopa de España a Arabia Saudí, país que seguirá siendo sede del torneo masculino hasta 2029 según los acuerdos firmados por la RFEF. Aunque por el momento la Supercopa femenina no forma parte de este contrato y sigue disputándose en España, la posibilidad de que en el futuro pueda trasladarse al país árabe, como ha declarado hoy Rafael Louzán en Movistar+, genera inquietud. Estos episodios no solo empañan el espíritu del fútbol, sino que también cuestionan si este tipo de decisiones priorizan realmente el crecimiento del deporte.